Frederic Rzewski interpreta El Pueblo Unido Jamás Será Vencido
Una de las frases de protesta más famosas de la historia tiene sus orígenes en 1973, cuando la agrupación chilena Quilapayún toma dicha consigna para hacerla canción. Más adelante, otra agrupación de raíces folcloristas, Inti-Illimani popularizó la canción, sobre todo durante su exilio en Italia.
El compositor estadounidense Frederic Rzewski viaja a Chile donde conoce la canción de Quilapayún. En 1975 decide componer una obra para piano tomando como tema El Pueblo Unido Jamás Será Vencido. La pieza de Rzewski cuenta con 36 variaciones del tema original, lo cual la hace una pieza muy larga en extensión, pero además una obra muy demandante en cuestión interpretativa, pues contiene muchos pasajes virtuosísticos y otros donde se apoya de técnicas compositivas contemporáneas así como del lenguaje extendido para la interpretación pianística, como el uso constante de armónicos, golpear la tapa del piano, silbidos, hacer sonidos con la voz, etc.
Variación 12, donde se le pide al pianista que silbe
Algunos han comparado esta pieza con las Variaciones Goldberg de Bach, y las Variaciones Diabelli de Beethoven, ya que más allá del simbolismo de la obra, es una pieza de gran valor musical y artístico.
Existen unas 4 grabaciones de esta obra, la de Ursula Oppens (a quien está dedicada la partitura), la de Stephen Dury, la del virtuoso canadiense Marc-André Hamelin, y la del mismo compositor en una integral de 7 discos donde interpreta toda su obra pianística.
Rzewski, al igual que George Crumb, es uno de los compositores más comprometidos de los Estados Unidos, es por eso que casi todas sus obras poseen algún contenido simbólico con relación a temas sociales, y de hecho esta pieza la dedica también al pueblo chileno, en un momento que él consideraba que existía una enorme injusticia.
El Pueblo Unido Jamás Será Vencido, por Inti-Illimani